Alimentación saludable y sostenible
Decálogo para una alimentación saludable y sostenible
Por el Día Mundial de la Alimentación, la SEA resume en 10 consejos prácticos las claves de una dieta cardiosaludable
Este domingo, 16 de octubre, se celebra el Día Mundial de la Alimentación. Coincidiendo con esta fecha, la Sociedad Española de Arteriosclerosis lanza su decálogo para una alimentación saludable y sostenible. Cómo y qué comemos influye directamente en nuestra salud y puede ser determinante para evitar un evento cardiovascular.
El
Dr. Pablo Pérez, responsable del
Grupo de Nutrición de la SEA, y director del
IMIBIC, insiste en que seguir las siguientes recomendaciones puede salvar vidas:
- Vigile su peso periódicamente y procure mantenerlo en niveles saludables. No tome alimentos muy calóricos y no consuma alimentos con azúcar añadida.
- Siga una alimentación más variada. Cocine en casa y utilice la menor cantidad de sal posible (no más de 5gr / día).
- Consuma al menos 5 raciones de fruta y verdura al día. Y coma legumbres al menos 2 o 3 veces por semana.
- Es saludable consumir frutos secos, no salados ni fritos, al menos dos veces por semana. No se deben tomar de postre en sustitución de la fruta.
- El pan que tomemos a diario, incluidos los cereales, deben ser integrales. El pan blanco y otros alimentos preparados con harinas refinadas, como la pizza precocinada, la bollería y la pastelería industrial, deben excluirse de nuestra dieta por ser ultraprocesados.
- Cocine y aliñe los alimentos con aceite de oliva virgen. Esta grasa debe ser la más importante de nuestra dieta. La mantequilla y la margarina pueden consumirse de forma ocasional (1 vez a la semana).
- Puede consumir a diario huevos, queso fresco, leche o yogur, estos dos últimos sin azúcar añadida. Nunca tome los productos lácteos en sustitución de la fruta.
- El pescado es una fuente importante de proteínas y de grasa omega 3, por lo que debe estar en nuestra dieta. Hay que evitar el consumo de pescados grandes en la infancia y en mujeres de edad fértil.
- Reducir todo lo posible la carne roja, como vacuno, cerdo, y cordero, y sustituirla por carne de pollo, que se puede consumir de 2 a 3 veces por semana. Los embutidos suelen ser ultraprocesados e igualmente se deben evitar.
- Los
ultraprocesados, sean productos cárnicos o no, los fritos de bolsa y la gran mayoría de los alimentos precocinados no son recomendables.
Alimentos de proximidad y de temporada
La contribución de los alimentos al calentamiento global depende tanto de su producción como de su transporte, por lo que debemos consumir alimentos de temporada y de proximidad, evitando los más lejanos. Además, los alimentos de temporada tienen más nutrientes y conservan su sabor natural. Si es posible, aumente su consumo de alimentos ecológicos.
Eliminar los alimentos ultraprocesados
Los
ultraprocesados, cárnicos o no, y la gran mayoría de los precocinados, contienen productos como azúcar añadido o grasas trans que favorecen el desarrollo de enfermedades crónicas, tanto cáncer como diabetes, obesidad y enfermedades cardiovasculares. Por ello deben estar alejados de nuestra dieta.
Evitar el alcohol
Está demostrado que el alcohol favorece, entre otros problemas de salud, el cáncer y el deterioro intelectual. Por ello, se debe evitar todo lo posible y reducirlo a un consumo muy ocasional.
“Cada pequeño cambio en línea a estos consejos hará que mejore su salud”, recuerda el
Dr. Pablo Pérez. Cada día suma y evolucionar hacia un
estilo de vida más saludable
es invertir en nuestro bienestar actual y futuro.

